Page 117 - Encuentros descoloniales Memorias de la primera Escuela de Pensamiento Descolonial Nuestramericano
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José    La gran divergencia                    117
                             Romero-Losacco  y La brecha coLoniaL






               i n t e r c a M b i o   d e   p r e g u n t a s   y   r e s p u e s t a s  EncuEntros

               Moderadora: Tenemos acá, José, cuatro preguntas. Te las voy a leer
           todas y tú las respondes en el orden que quieras. Hay una primera que
           dice: ¿estamos en el fin de la economía mundial tal como la conocemos?   DEscolonialEs:
           La segunda: partimos de una comparación productiva y económica entre
           Occidente y Asia, ¿no estamos tomando los mismos paradigmas desarrollis-
           tas que emplea el eurocentrismo?, ¿no existen otros caminos para medir el
           progreso?, ¿no nombra al África subsahariana esos estándares? La tercera:   MEMorias
           ¿cómo es lo del sistema-mundo y el sistema mundo, con guion y sin guion?
               José Romero-Losacco: Vamos a empezar por dos que tienen relación.
           El usar los mismos términos productivistas con lo que Occidente mide su
           llamado “progreso” para pensar otras realidades. Asumo, de entrada, lo    DE la
           problemático de hacerlo y al final me remito a Calibán para responder la
           pregunta. Me remito a él en dos dimensiones; la dimensión primera, que
           parte del conflicto en el que nos encontramos, el conflicto existencial para
           trascender, para construir ese mundo transmoderno, del que nos hablaba   PriMEra
           Dussel ayer, es que lo hacemos desde el lenguaje del colonizador, y recuerdo
           a Calibán por aquella escena en la que Calibán maldice a Próspero con la
           lengua que Próspero le ha dado; pero al mismo tiempo, este tipo de ejercicio
           permite demostrar que, incluso, con los términos con los que Occidente   EscuEla
           mide su superioridad sale perdiendo en las comparaciones.
               Por supuesto, es necesario encontrar otras formas de entender los
           procesos civilizatorios, otras formas de entender la experiencia de la
           humanidad de múltiples comunidades, pero en este momento también es   DE PEnsaMiEnto
           importante comenzar a mostrar y tener herramientas para decir: “¡Ey, tú,
           Occidente!, no eres lo que crees que eres porque, incluso con los argumentos
           que usas para decir que eres superior, podemos demostrar que no lo eres”;
           para demostrar que Occidente no es el único que innova, no es el único que   DEscolonial
           crea tecnología, que hay otros pueblos que lo han hecho antes y que esos
           otros pueblos, además, han construido tecnología desde otros horizontes.
               Por ejemplo, en el caso chino, estos no tuvieron deuda externa hasta el
           siglo xix, la deuda externa de los Estados europeos fue gigantesca siempre   nuEstroaMEricano
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