Page 31 - Influencia de las mujeres en la formación del alma americana
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30 30 INFLUENCIA DE LAS MUJERES EN LA FORMACIÓN DEL ALMA AMERICANA
Independencia: son las inspiradoras y las realizadoras. En México,
en Bogotá, en Lima, en Quito, en Caracas, en Buenos Aires, en La
Habana, siguen idéntica evolución. Parecen moverse en la misma
ciudad, son vecinas del mismo barrio, son hermanas. Si Colombia,
Venezuela, Argentina, Chile, Ecuador, guardan su largo marti-
rologio de heroínas realizadoras y amantes, las grandes de la Inde-
pendencia; es a México y al Perú donde he venido a buscar hoy dos
humildes flores indígenas como prototipos de las primitivas dolo-
rosas. Junto a la Malinche mexicana doña Marina, glorificada y feliz
al fin de su vida, la melancólica ñusta doña Isabel, nieta del monarca
peruano Túpac Yupanqui y madre del primer escritor americano, el
tierno Garcilaso de la Vega. La vida de esta última pasará dulcemente
entre el amor y las lágrimas. Como fruto de su mansa abnegación no
recogerá sino ingratitud y desamor. No importa, se refugiará en el
silencio y la resignación. Su dolor de abandonada madurado por su
hijo en la añoranza y el destierro producirá, muchos años después,
uno de los más bellos libros de la literatura clásica española: Comen-
tarios reales.
Se ha hablado siempre con admiración del genio político de
Hernán Cortés, de su sagacidad extraordinaria para tratar y pactar
con los indios. Yo creo, señores, que esa sagacidad misteriosa de
Cortés se llama exclusivamente doña Marina. En las diversas
crónicas sobre la Conquista de la Nueva España, es decir, en las dos
o tres que conozco, se le atribuye a doña Marina un papel impor-
tante en cuanto a intérprete y mediadora; dando consejos acertados
o descubriendo conjuraciones, como la de Cholula, en la que se
tramaba la muerte de Cortés y de toda la expedición. A través de lo
poco que se dice, se adivina lo mucho que no se cuenta. Es absolu-
tamente seguro que la influencia de doña Marina en la Conquista
de México fue más importante, su mediación y sus consejos mucho
más frecuentes y sutiles de lo reconocido por los historiadores, aun