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Guanipa Endenantico

sale y con el que entra. El único loco nuestro que reconocemos
es Lambido, quien además es un loco pacífico y respetuoso, un

caminante impenitente de la carretera y, después de Lambido,
ni un solo loco más aceptaremos en nuestra jurisdicción, ni
un cascado más, ni un alienado más, esa es nuestra bandera y
nuestra consigna (dejen los aplausos); a menos que el desequi-

librado, el carcamal o el mísero se haya vuelto tal aquí. Pero
loco importado, NO.

Sepan que en el otro municipio, en este mismo momento,

se celebra otra sesión extraordinaria, por estas mismas razones. Es
probable que ellos tomen medidas similares, pero estaremos alertas.
No aceptaremos cinismo, desfachatez, desvergüenza. Así como
en la historia hubo Guerras Santas y Guerras Médicas, estamos

dispuestos a declarar una Guerra Loca, si nos provocan y agotan
nuestra infinita paciencia. Y loco que la prefectura, la alcaldía y el
concejo de allá nos metan de contrabando en la ciudad, loco que les
devolveremos. En este preciso momento –es un punto de informa-

ción- está saliendo un camión del Aseo Urbano con el último lote.
Se lo vamos a soltar, para que vean que sabemos de dónde vienen
los infelices, en la misma Plaza Bolívar y a pleno mediodía. Y les
pondremos una pancarta allí que diga: “Aquí están sus locos”. He

dicho, enajenados concejales, demenciales periodistas y alienados
invitados (aplausos prolongados).

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