Page 27 - Vida ejemplar de Simón Bolívar
P. 27

Santiago Key Ayala

            Después, un colaborador secundario. Crece en prestigio y en
            audacia. Encabeza la revolución de Venezuela. Encabeza después
            la de gran parte de América. Llegan momentos culminantes, en
            que la suerte del gran movimiento americano está subordinada a
            la suerte de sus empresas. Si estas fracasaran, el Partido Realista,
            con toda la fuerza latente de la tradición, alzaría la voz en todas
            partes y emprendería la reconquista de las tierras libertadas. Tal
            era la situación antes de Junín y Ayacucho. Él estuvo al nivel de
            su gran responsabilidad. Triunfó y con él, América.
               Así cumplió el guerrero. También cumplió el político. Por su
            pensamiento, por su constancia, por su verbo, por sus realizaciones,
            por su amplia visión y comprensión de los problemas americanos,
            personifica en definitiva, para sus contemporáneos, la revolución
            de la América entera. Su personificación es reconocida por sus
            enemigos, por los historiadores patrios. Congresos, conferencias,
            gobiernos y grandes pensadores. Personifica el ideal democrático,
            personifica el espíritu de América. Personifica el Nuevo Mundo.
               Terminada la guerra, todavía queda mucho por hacer al
            Libertador. Liberar no significa solo emancipar del poder de
            España los territorios americanos. Significa libertar a los propios
            pueblos de los abusos, de los prejuicios, de la ignorancia, de los
            malos hábitos que se perpetúan al amparo de la tiranía. Esta nueva
            liberación exige aún más tiempo, constancia y energía que la obra
            de la espada. Bolívar la emprende a medida que batalla. Es una
            nueva guerra dificultosa, no ya contra un enemigo declarado, sino
            contra vicios de gran raigambre y reciedumbre, encarnados en los
            amigos, en los colaboradores, en los pueblos mismos. Los pueblos
            que van  a  ser  favorecidos  por  esa  forma  nueva  de libertad, son
            los primeros en desconocerla, en estorbarla, en destruirla. Expían
            su ignorancia, su candidez, sus instintos. Cuántos no tienen el
            desinterés de Bolívar, cuántos envidian su gloria; los ambiciosos,
            los explotadores, los parásitos, todos aquellos para quienes el
            desorden, la indisciplina, la injusticia son fuentes de provecho
            personal, reaccionan contra el Libertador. Inventan calumnias,
            exageran los errores, tergiversan los propósitos. Explotan las
            imprudencias para destruir su crédito entre las gentes de buena
            fe. Lo llaman tirano. Hombres honrados llegan a dudar de él.
               Agotada su naturaleza física, asqueado de las traiciones, de
            las hipocresías, Bolívar se siente solo entre unos pocos amigos


                                      26
   22   23   24   25   26   27   28   29   30   31   32