Page 130 - La dimensión internacional del Gran Mariscal de Ayacucho
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130  Rafael Ramón Castellanos



                 benignidad que V. E. decanta por no haber ejecutado a Borrero,
                 autorizado para ello por los tratados de noviembre, citando estos
                 convenios que para economizar la sangre han prohibido el castigo
                 de muerte aun a los criminales?

                   El capitán Borrero bajo ningún concepto puede ser un delincuen-
                 te, ni prisionero de guerra; antes debe ser satisfecho por los agravios
                 que ha recibido en la detención; de lo contrario, la conducta de V.
                 E. arreglará la mía.
                   Respecto a los recursos débiles o fuerzas de la República para
                 completar su independencia en esta parte, me refiero al primer día
                 de batalla en que las amenazas de la pluma no competirán a las de
                 las espadas; y por lo que hace a los insultos con que V. E. ha pre-
                 tendido ofenderme, apenas ellos han excitado mi desprecio: nada
                 hacen a mi objeto y los he considerado como la exaltación del ren-
                 dido orgulloso.
                   Concluiré pidiendo que V. E. conteste categóricamente si reco-
                 noce o no a la provincia de Guayaquil comprendida en el Tratado
                 de Regulación de la Guerra; será ésta nuestra última comunicación
                 para evitar a V. E. sus recelos por los espías que teme tan inconsi-
                 deradamente cuando 500.000 habitantes que le rodean son otros
                 500.000 espías que sirven al ejército libertador. 180

               Sucre aunó aprestos para consolidar la campaña sobre Quito y ha de brin-
             dar una más de sus demostraciones de vehemencia y factoría de bien en el
             Derecho Internacional Humanitario. Mientras que el General Aymerich
             ha dado tan improcedente trato a su Comisionado, el Capitán Eugenio
             Borrero, él interviene para solicitarle al Gobernador de Guayaquil que no
             confirme la pena de muerte de un súbdito español acusado de cooperación
             con las fuerzas realistas. Hay que recalcar que había dejado de tener vigencia

             el Tratado de Armisticio y que la situación que impulsaba el jefe español
             con aquel acto desorbitado, contra el capitán Borrero, podría alejar a Sucre


             [ 180 ]_ SUCRE, Antonio José.- De mi propia mano, p. 39-41.
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