Page 101 - El cantar del Catatumbo
P. 101

Él y su hermano gemelo Héctor construyeron su
            primer teatrino siendo adolescentes, en Córdoba,
            Argentina. Desde entonces, con su teatro La Pareja
            trabajaron sin tregua, fundando escuelas, formando
            grupos, dignificando la profesión, como le gusta recalcar
            a este hombre magro, ágil que a sus 80 años lucha con
            el mismo fervor de sus años mozos.
               Lo visitamos con Leonardo Ruiz. Hablamos del
            poder de convocatoria del teatro de títeres, de cómo en
            cada función se puede distribuir material de prevención
            sanitaria, de protección del medio ambiente.
               También acordamos en que sería importante con-
            vocar allí a los promotores culturales para que se pueda
            reproducir en cada región esta experiencia, sus métodos
            de enseñanza y de incentivación cultural. De esta manera
            se contribuiría en recuperar para el país este patrimonio
            que es el Teatro Tempo con todo su valioso memorial.
               Distinguido en muchos países, este Maese solo
            pide tiempo para seguir trabajando. “Me entusiasmo
            tanto que a veces solo duermo cuatro horas”, nos dice.
            Después se levanta y nos despide.
               Se arremanga.
               Es hora de que salga el Diablo.









            100
   96   97   98   99   100   101   102   103   104   105   106