Page 228 - La dimensión internacional del Gran Mariscal de Ayacucho
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228  Rafael Ramón Castellanos



                   Devuelvo a V. S. el tratado de armisticio que le concedió el ayu-
                 dante general Elizalde; este oficial me dice que mostró a V. S. mis
                 instrucciones en que expresamente se ponía como única condi-
                 ción para permitir una suspensión de armas por dos meses, que
                 el ejército libertador ocupase a La Paz y Oruro, y esto para que V.
                 S. pudiera reunir diputados de las provincias que pronunciasen
                 sus votos. No retraigo mi palabra: bajo aquella condición puede
                 V. S. retirarse a Potosí y que una asamblea de diputados de las
                 provincias decida de su suerte, sin que las armas se empleen más
                 que en mantener el orden. Si V. S. ama el bien de la América,
                 como ha dicho tantas veces, no se opondrá a la felicidad que ella
                 se procura ni a la voluntad libre de esos pueblos. De otra manera.
                 ¿Qué quiere decir este armisticio tan cubierto de mala fe? No,
                 señor general; no es justo que mi candor sea retribuido con actos
                 que infamen su nombre.
                   El ejército libertador se ha puesto en marcha; él decidirá esta cues-
                 tión, si V.S. rehúsa tratar en doce días los negocios del Alto Perú.
                 El ejército sólo exige que esos pueblos dejen de ser españoles: de
                 resto protesta que no tiene pretensión alguna sobre ellos, ni que se
                 mezclará en sus negocios económicos. 320
               Se ajustan a una realidad incuestionable a este respecto los conceptos del
             escritor boliviano Juan Vidaurre, quien apunta:

                   Bolivia fue creada mediante la guerra, pero también por la di-
                 plomacia; ambos factores frecuentemente se conjugan. La guerra
                 establece el orden nuevo con auxilio de la diplomacia. Esta con fre-
                 cuencia se apoyó en la fuerza. La guerra de la independencia basa-
                 da en imperativos y en doctrinas, fue orientada por hábiles manos
                 diplomáticas e influenciada por factores de política internacional.

               En la fase final del proceso emancipador, la paz de Ayacucho es un acto
             diplomático de gran sabiduría. La capitulación, instrumento político di-



             [ 320 ]_ Archivo de Sucre. Tomo V, p. 101.
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