Page 555 - De Angostura a Colombia EL COMBATE POR LA LIBERTAD Y UNA MAGNA REPÚBLICA EN 1819
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             visión fugaz y deben poner el resto de su cuenta (…) cómo rete-
             ner la imagen del hombre? Esa es la pregunta que los retratistas
             se habrán formulado una y otra vez” .
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            Sabidas estas condiciones, cabría preguntarse cuál fue la apariencia
          que vio Figueroa en el rostro de Bolívar, tomando en cuenta la exte-
          nuante campaña que acababa de concluir. Cuál sería la apariencia de su
          físico facial habiéndose este sometido a los rigores que tal empresa exi-

          gía, sujeto a una precaria alimentación y expuesto a los más extenuantes
          recorridos por intrincados parajes de la geografía tropical. Después de
          haber cruzado durante seis días un páramo infernal en el que se perdió
          la mitad de la caballería, bagajes de guerra y una cuantía de recursos
          humanos por enfermedad, hambre, frío o precipitados por aquellos em-
          pinados desfiladeros . El mismo Florentino Gonzales quien años pos-
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          teriores se involucraría en el espantoso atentado septembrino contra la
          persona del Libertador, narra en sus memorias cómo vio llegar a aque-
          llos soldados el día de su entrada a Bogotá, luego del trajinoso itinerario
          por el páramo de Pisba y de la Batalla en Boyacá:

               El ejército Libertador llegó desnudo y desprovisto de todo;
             los oficiales mismos no tenían una casaca ni un par de zapatos.
             Me acuerdo que cuando tuve el gusto de abrazar a mis dos tíos
             Fermín y José Vargas, entonces capitán el primero y teniente
             el segundo, y después coroneles de Colombia, todo su vestido
             consistía en un pantalón, una camisa y capisayo. Su calzado era
             un par de alpargatas; y si así estaban vestidos los oficiales fácil es
             suponer como estarían los soldados .
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          [30]_ Rafael Pineda. Las estatuas de Simón Bolívar en el mundo. Centro Simón Bolívar,
          2.ª edición aumentada y corregida, Caracas, 1997, p. 16.
          [31]_ Véase O’Leary, volumen 27, tomo primero pp. 560-570.
          [32]_ Florentino González. Memorias. Editorial Bedout, volumen 91. Medellín Co-
          lombia, 1971, p. 67.
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