Page 32 - Todo César: Panorama de vida y obra
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Todo César 31



                                                                                      la madurez dramática la alcanza en estos años, cuando también escribe, entre
                                                                                      otras piezas, El vendaval amarillo, basada en el incendio petrolero de la Cabimas
                                                                                      original. Para él, que siempre creyó en la concatenación de las artes, pintura y
                                                                                      teatro se complementan. Lo afirma así en varias ocasiones y evoca, como ejem-
                                                                                      plo en el país, la pintura de Cristóbal Rojas, donde se evidencia, según él, una
                                                                                      visión teatral del drama que se expresa.
                                                                                        La pintura toca también el hecho petrolero: las torres petroleras dominan sus
                                                                                      paisajes y las vidas de los hombres que los ocupan, también los magueyes, las
                                                                                      tierras áridas y abandonadas. En su pintura, el teatro muchas veces lo domina
                                                                                      y nacen personajes de sus obras, visualizados en los enormes espacios del país:
                                                                                      Brusca la Rompefuegos, Uno de Ezequiel Zamora...
                                                                                        Esta labor creativa continuada se interrumpe cuando, ya caído Pérez Jimé-
                                                                                      nez y fresca aún la asunción de la Junta cívico-militar, llegó muy temprano en
                                                                                      la mañana a la casita de El Prado, su amigo Gonzalo Rincón. Iba a proponerle
                                                                                      encargarse de la Dirección de Cultura de la Universidad de Los Andes, cuyo
                                                                                      primer rector en esa nueva etapa de la política venezolana era su hermano Pedro
                                                                                      Rincón, obstetra, que a partir de entonces, solo con dos breves y reglamenta-
               Con el grupo de teatro de la Universidad de Los Andes  (ULA). 1958-59. Cortesía de la familia Rengifo.
                                                                                      rias interrupciones, asumirá el rectorado como oficio y será, por cerca de treinta
               la propuesta y realiza sobre la base del mito de la creación de los tamanacos, el  años, sencillamente Perucho el rector.
               proyecto que denominará Mito de Amalivaca, y que elabora siguiendo las técnicas   A Mérida va entonces toda la familia, y él, con la pasión que ponía en todo lo
               del muralismo bizantino, utilizando vidrio veneciano, en el sótano del Centro  que creaba, ataca el arduo trabajo de Cultura y Extensión Universitaria. Orga-
               Simón Bolívar. Es un trabajo de gran belleza que tendrá voz propia para hablarle  niza la primera Campaña de Alfabetización que ejecuta la Universidad y crea las
               al pueblo, porque refiere a lo que efectivamente era nuestro pueblo inicialmente,  escuelas de ballet y teatro, entre otras cosas. Pero no pinta ni escribe. No tiene el
               antes de su fusión. Finaliza justamente cuando un indígena señala un casco de  tiempo ni la calma para eso. Aun así la casa (Obispo Lora, quinta Rosaleda) está
               soldado español, elemento completamente extraño a su contexto. Este mural  siempre llena de jóvenes que le consultan o trabajan política y culturalmente
               servirá para afianzar lo que teóricamente sostenía: “El arte es el medio cabal de  con él. Está otra vez en el ejercicio magisterial, pero ni siquiera lo presiente.
               comunicación espiritual entre los hombres en el curso del tiempo, y esa comuni-  En 1960, ya de regreso a Caracas después de la incursión burocrático-acadé-
               cación no se establece si el arte se produce oscuro, hermético, incomprensible”.  mica que retoña, florece y fructifica con el correr del tiempo, retoma con más
                 Su mentor político continúa siendo Salvador de la Plaza, a quien consulta  fuerza el teatro y su pintura. Lo que no impide que se tome un tiempo para
               antes de tomar decisiones importantes. Por entonces, escribe mucho y pinta  viajar como invitado a los actos de celebración del XI Aniversario de la Revolu-
               incansablemente. La temática histórica de su teatro comienza a conjugarse con  ción China. Forma parte de un grupo de intelectuales que viajan con el mismo
               una temática social más directa y contemporánea: el petróleo. De esta época es  propósito. Las anécdotas que cuenta al regreso son muy ricas, pero hay algo que
               La sonata del alba, cuya anécdota transcurre en un barrio de los cerros caraque-  choca en todo lo que ha visto, y es que se ha iniciado –aún sin trascender– el
               ños durante un aguacero, pero que igual ocurriría en las favelas brasileñas o  distanciamiento entre soviéticos y chinos.
               en las “villas miseria” de cualquier país latinoamericano, en cualquier tiempo   En verdad esta será para él una década itinerante. Para el mundo se ha iniciado
               de este siglo, porque es una obra concebida con un carácter universal. Creo que  una nueva vuelta en la espiral histórica: ha comenzado la era de las bombas de
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