Page 158 - Escritos de ayer y hoy
P. 158
planteada la lucha por una democracia para las mayorías,
a la cual hay que dotar de contenido y viabilidad.
Otro de los aportes políticos invalorables de la insurgencia
del movimiento militar es que evidenció la naturaleza pro-
funda de la crisis, poniendo sobre el tapete la discusión del
problema del Gobierno y del poder y ha develado –de qué ma-
nera– la existencia de la crisis en el seno de la institución pilar
del sistema: el Ejército.
A golpe de ametralladora y en menos de 24 horas, la insur-
gencia del movimiento bolivariano sacó del debate del círculo
pequeño de la lucha aislada por esta o aquella reivindicación,
de la estrechez del localismo y de la actividad parcelaria, en
el marco de los cuales se han desenvuelto la mayoría de los
núcleos populares y/o revolucionarios –incluyendo el propio
movimiento bolivariano que orgánicamente y en forma local
se conformó y desarrolló en el seno del Ejército–. La discusión
sobre la búsqueda de una solución global, nacional y radical
quedó sobre el tapete; la idea de que es posible transformar
las cosas quedó sembrada como una ventana abierta hacia la
esperanza.
Otra idea: la de sálvese quien pueda, la tesis de las salidas
individuales o individualistas, inherente a la concepción según
la cual “el mercado” lo resuelve todo, que eran sumamente gol-
peadas en el movimiento popular. No se trata de sembrar ilu-
siones inmediatistas ni de despreciar el trabajo local en el seno
del pueblo, sino de establecer que la tarea de unir las fuerzas
inmediatas de los trabajadores y de todo el pueblo a la lucha
nacional por otra democracia; por una democracia popular so-
lidaria, soberana, bolivariana, que sirva a las mayorías, ha sido
favorecida. La tarea de avanzar, de poner al descubierto la clase
burguesa, oligárquica, proimperialista de la actual democracia
bipartidista, ha resultado favorecida. Y esa es una condición
157