Page 368 - Todo César: Panorama de vida y obra
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               intensa y extensamente. De este teatro popular van a surgir no solamente acto-  no tenemos autores de repercusión nacional ni internacional, como Teresa de
               res y directores de relevo, sino también dramaturgos de relevo.        la Parra, Mario Briceño Iragorry, José Rafael Pocaterra o como Rómulo Galle-
                                                                                      gos. Con los poetas sucede lo mismo. Todavía el juglar venezolano sigue siendo
                 La palabra relevo despertó el adormilado cerebro de Ramón Hernández. Le  Andrés Eloy Blanco, muchos jóvenes lo conocen y eso a través de vías tortuo-
               hizo recordar aquello de las generaciones de relevo que no han logrado relevar  sas. El otro juglar es Aquiles Nazoa, a quien se nombra mucho, pero se ignora
               a los de la generación del 28 en cuanto a política ni en cuanto al quehacer cultu-  su poesía seria, su poesía realmente cargada de valores estéticos y sensibles. En
               ral. Tartamudeó, ejemplificó como pudo, y al final de tan enorme esfuerzo de su  la cuentística lo mismo. Tenemos muchos cuentistas, pero ninguno de ellos ha
               materia gris obtuvo la explicación de César Rengifo.                   rebajado la popularidad y la trascendencia que nacionalmente tuvo José Rafael
                                                                                      Pocaterra con sus Cuentos grotescos, o Pedro Emilio Coll. Hoy nuestros cuentis-
                 —No hay generaciones de relevo por la falta de incorporación, total o firme,  tas jóvenes no trascienden como aquellos, pese al esfuerzo que hacen y a la cali-
               del  pueblo.  La  participación  popular  ha  sido  menguada  por  las  condiciones  dad que muchos poseen. Es que su promoción está controlada. Se promociona
               económicas de nuestro país. Ya sabemos cuánto le cuesta a un trabajador poner  lo que conviene a los grandes intereses, que no son precisamente los más altos
               a su hijo en la universidad. Pero, por otro lado, resulta imposible que un país que  intereses estéticos.
               necesita prepararse técnicamente no tenga aulas para darle cabida a la multitud   —Estamos viviendo una carraplana cultural.
               de jóvenes que desean, necesitan, capacitarse. Eso ha posibilitado que no haya   —No, la palabra carraplana me resulta muy, muy…
               generación de relevo en muchos de los campos de la cultura.              —¿Muy adeca?
                 —¿Usted le quita culpa a los que ya llegaron y no han creado escuelas?  —Sí, muy vulgar, muy desagradable. Creo que estamos viviendo una crisis
                 —Ha habido una gran culpabilidad de las generaciones anteriores. Yo no  cultural de dependencia cada vez más acentuada. A partir de allí se presentan
               me excluyo como integrante de esa generación de mayores que no se han preo-  todos los demás fenómenos. Si estamos claros en que somos un país depen-
               cupado por formar generaciones de relevo. El hecho palpable lo vemos en los  diente,  existencial  y  culturalmente,  podremos  entender  las  situaciones  que
               partidos políticos. Uno toma los partidos políticos actuales y encuentra tres  acogotan la vida venezolana, encararlas y vencerlas.
               o cuatro figurones, o grandes figuras, o figuras respetables –porque las hay–,   —Eso  se  ha  venido  repitiendo  durante  muchos  años  y  la  situación  no  ha
               pero después de esos figurones no encuentra los relevos. No encuentra la perso-  cambiado.
               nalidad que vaya a sustituir dentro de Copei a un Caldera; ni dentro de AD a un   —No hemos avanzado porque hay intereses exteriores e interiores muy pode-
               Rómulo Betancourt; ni dentro de URD a un Jóvito Villalba; ni dentro del MEP  rosos que medran sobre esa situación. Esos intereses son defendidos con todos
               a un Prieto Figueroa. Eso que se ve en los partidos lo vemos en otras facetas de  los hierros, francos y sutiles, por los sectores que los disfrutan, pero dejan un
               la vida venezolana. De pronto es casi una verdad aquel dicho nefasto de López  margen para que se critique.
               Contreras de que hay crisis de hombres.                                  —¿Dejan hablar pero no hacen caso?
                                                                                        —¡Claro!  Es  como  al  loco  que  permiten  que  sea  loco  mientras  no  cause
                 No se queda en la frase, la explica, la somete a una rigurosa disección aplicán-  daños. Dentro del sistema hay mecanismos de aparente libertad, de aparente
               dola al campo de la cultura.                                           “poder decir”. Pero como decía nuestro pueblo antes: con palabras y papelitos
                                                                                      no se tumban gobiernos.
                 —Nuestro país ha sido castrado en cuanto a grandes personalidades. En el   —¿Es por eso que César Rengifo es representado solo por los grupos teatrales
               arte, la novela, la cuentística y la poesía lo estamos viviendo palpablemente.  populares?
               En la novela, aparte de Salvador Garmendia y dos o tres grandes nombres más,   —Hay algo de eso.
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