Page 366 - Todo César: Panorama de vida y obra

Todo César 365

—El mundo cultural venezolano es una tierra de Caín donde todos se entre- destruir la conciencia nacional ha sido necesario también destruir la conciencia
comen. Indudablemente que los enemigos de la cultura venezolana, tanto los de los intelectuales, pervertirla. Impedirles presentar en sus obras la realidad
internos como los externos, han hecho una labor muy eficaz para dividir a nues- nacional y señalar sus defectos, lo que crearía condiciones en el ánimo público
tras gentes que trabajan con el intelecto. Han transformado a los intelectuales para solventar esas situaciones. Nuestros intelectuales han sido víctimas de esos
en archipiélagos, nos han atomizado y nos han tirado a pelear unos contra otros. planes divisorios, de esos planes para enajenarlos, alienarlos y para impedir que
Unas veces valiéndose de posiciones estéticas, otras con el argumento político cumplan la tarea signada en todos los países a las fuerzas intelectuales. En nues-
y, en ocasiones, por banalidades. Por ello, los intelectuales no han sido capa- tro país los intelectuales son una fuerza detenida, menguada y hasta destruida.
ces de organizarse. Es ahora cuando la gente de teatro ha hecho tal tentativa. —Juan Liscano dice que nuestros escritores no escriben ni nuestros pintores
Además, todos los que cumplen una labor artística han sido inducidos, pienso pintan porque comen demasiado bien y viven demasiado bien ¿Eso es parte de
yo, a no organizarse. Hay hasta quienes desdeñan la organización, la protestan un complot internacional?
y la desprecian. —No. Juan Liscano se equivoca. Los hombres de vanguardia en el mundo
luchamos porque toda la humanidad coma bien, viva bien, se vista bien y
Frena. Se da cuenta de que se está saliendo de su idea, del cainismo; sin mala- habite en una casa que le ofrezca a ellos y a sus familias todo el bienestar, toda
barismos idiomáticos regresa al punto de partida: la holgura necesaria para un ser humano. No creo que un intelectual, por el
hecho de que coma bien y viva bien, vaya a menguar su capacidad creadora. Al
—Se fomenta el cainismo entre los intelectuales en lugar de la fraternidad, la contrario, en la medida en que un intelectual goce de mejores condiciones, su
cordialidad y la toma de conciencia de que todos participamos en crear cultura producción será mejor. Todas sus capacidades se concentran en la creación, sin
para nuestro país y para la sociedad en general. Esto tiene una raíz colonialista. ser desviadas hacia otros campos por angustias e inquietudes.
En la medida en que los intelectuales no se unan y se pierdan en peleas internas
o en actividades hedónicas, no serán una fuerza primordial en la construcción El preguntador estaba empeñado en llevar la contraria. Le dijo que la historia
del espíritu del país, ni podrán guiarlo desde el punto de vista intelectual. estaba repleta (¡qué exagerado!) de casos de creadores que produjeron excelen-
tes obras bajo la más absoluta pobreza. Y no se quedó ahí, sino que casi le afirmó
Pero su afirmación no solo abarca el mundo abstracto del pensamiento, sino que cuando el creador no atraviesa problemas se dedica a cultivar el arte por el
que se extiende a la propia obra del creador. arte.
César Rengifo hizo gala de una gran paciencia hacia la ignorancia del habla-
—Cuando los artistas pierden el tiempo peleando entre sí, o pierden el tiempo dor que se atreve a ejercer el periodismo.
en cafés, en tertulias de botillería o en disquisiciones banales, sus propias obras
se menguan. —Eso tiene de lo uno y de lo otro. Se han dado casos en que grandes artistas,
en condiciones precarias y difíciles, han logrado producir grandes obras, pero
Todo tiene una razón. César Rengifo explica cuál es la razón del cainismo: son casos aislados. Casos donde la tenacidad, la fuerza creadora se han impuesto
por encima de todas las contingencias. Un simple vistazo a la historia nos señala
—Se puede pensar que se produce espontáneamente; no es así. En los últimos que aquellos artistas que han tenido condiciones económicas propicias, han
cincuenta años hemos visto cómo en Venezuela se ha ido enajenando la concien- podido dejar para el mundo obras realmente trascendentales, y no solo desde el
cia nacional, cómo se ha destruido el ser venezolano. Eso no ha sido por genera- punto de vista cualitativo, sino también cuantitativo. No podemos esquemati-
ción espontánea. Todo ha sido muy bien planificado, muy bien organizado. Para zar y decir que es en la miseria donde el artista puede producir. Eso negaría las
posibilidades de futuro, un futuro que queremos sin las antihumanidades del