Page 183 - Sencillamente Aquiles
P. 183
UNA PELA
Por fin, después de toda una semana
de llovizna obstinada y fastidiosa,
ha vuelto a aparecer, como una rosa
de juventud, el sol esta mañana.
Y abierta hacia los campos la ventana
me siento ante mi Rémington mohosa,
con ganas de escribir alguna cosa
en loor de San Isidro y de Doñana.
Pero de pronto, rotos, conmovidos,
me llegan unos trágicos gemidos
y el áspero chasquear de una correa.
Y olvido a San Isidro y a Doñana…
¡Cómo encontrar hermosa una mañana
que para un pobre niño está tan fea!
183