Page 114 - Sencillamente Aquiles
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ARROCERAS
A Cecilia y a Pilar,
mis dos vecinas de enfrente,
las llaman «patacalientes»
por su afición a bailar.
Cuando no por celebrar
el santo de Fulanito,
es… por lo que importa un pito,
lo cierto es que estas hermanas
no se pasan dos semanas
sin montar un arrocito.
Hay que ver ese trajín
de Cecilia y de Pilar
cuando empiezan a arreglar
la casa para el festín.
Casa de pobres al fin,
no tiene grandes salones
pero ellas, sin más cuestiones,
resuelven lo del tamaño
trasladando para el baño
las camas y los colchones.
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