Page 41 - ¿Por qué se ha reducido el territorio venezolano?
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¿Por qué se ha reducido el territorio venezolano?   Earle Herrera


            belicistas de aquí y de allá –y de más allá, sobre todo– arriman
            su brasa a la candela. En La Guerra Secreta del Petróleo, Jacques
            Bergier y Bernard Thomas enumeran decenas de conflictos in-
            ternacionales cuyo único móvil ha sido el oro negro. Hoy día,
            con la crisis energética, estos hidrocarburos se hacen más va-
            liosos y codiciados. Ya Ford amenazó al mundo con la bomba
            atómica y Kissinger con tomar los pozos petroleros árabes por
            razones puramente petroleras.
               En los últimos años, tanto en Venezuela como en Colombia,
            se han dejado escuchar clarinadas de guerra. Los «patriotas»
            de Caracas y Bogotá –siempre en nombre de Simón Bolívar– se
            rasgan las vestiduras llamando a «pararle» el trote al enemigo
            usurpador. Militares retirados de uno y otro país reclaman no
            ceder ni un milímetro de las fronteras y hasta circulan algunos
            folletos por allí que insinúan la táctica de guerra que se ha de
            emplear, de acuerdo con la nacionalidad del autor, para aplastar
            al enemigo en cuestión de horas.
               El colombiano Arturo Guillin Villamil escribió un folletín sal-
            picado de insultos, titulado «La agresión de Venezuela a Colom-
            bia»,  en el cual plantea: «La soberanía en nuestras fronteras, en
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            nuestras costas y en todo nuestro extenso territorio, no se defien-
            de solamente con los títulos notariales y cédulas reales, y fuera de
            su poblamiento, construcción de obras e integración económica
            en todos los aspectos, debemos tener también un ejército moder-
            no, capaz, bien armado y bien pagado, porque así lo exige la situa-
            ción y la dignidad de Colombia». Y más adelante añade:


                 Lo que puede suceder y no será una expedición fantasma,
 Mapa tomado del diario El Nacional, del 6 de enero de 1976, P. D-1.  ni submarina, ni submarinos de ficción, es que cualquier
                 día nuestro optimista director de Relaciones Exteriores se
                 vea invadido por una flota de verdad, bombardeado por


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