Page 354 - La escena contemporánea y otros escritos
P. 354
La escena contemporánea y otros escritos
por las turbas jingoístas. El gobierno es el primero en resistir a las obli-
gaciones de la paz, Una reciente información de Polonia dice a este
respecto: “El antisemitismo gubernamental y social parece acentuarse
en Polonia. Hasta ahora las leyes de excepción legadas a Polonia por la
Rusia zarista no han sido abrogadas”.
Otro foco activo de antisemitismo es Rumania. Este país contiene
igualmente una fuerte minoría israelita. Las persecuciones han causado
un éxodo. Una gran parte de los inmigrantes que afluyen a Palestina
proceden de Rumania. El número de israelitas que quedan en Rumania
se acerca, sin embargo, a 755.000. Como en toda Europa, los hebreos
componen en Rumania un estrato urbano. Y, en Rumania como en
otras naciones de Europa Oriental, la legislación y la administración se
inspiran principalmente en los intereses de las clases rurales. No por
esto los judíos son menos combatidos dentro de las ciudades, demasiado
saturadas naturalmente de sentimiento campesino. El nacionalismo
y el conservatismo rumanos no pueden perdonarles la adquisición del
derecho de ciudadanía, el acceso a las profesiones liberales. El odio anti-
semita monta su guardia en las universidades. Se encarniza contra los
estudiantes israelitas. Reclama la adopción del Numerus Clasus, que
consiste en la restricción al mínimo de la admisión de israelitas en los
estudios universitarios.
El Numerus Clasus rige desde hace tiempo en Hungría, donde a la
derrota de la revolución co munista siguió un período de terror antise-
mita. La persecución de comunistas, no menos feroz que la persecu-
ción de cristianos del Imperio Romano, se caracterizó por una serie de
pogroms. Los judíos, bajo este régimen de terror, perdieron práctica-
mente todo derecho a la protección de las leyes y los tribunales. Se les
atribuía la responsabilidad de la revolución sovietista. ¿Un israelita, Bela
Khun, no había sido el presidente de la República Socialista Húngara?
Este hecho parecía suficiente para condenar a toda la raza judía a una
truculenta represión. No obstante el tiempo trascurrido desde entonces,
el furor antisemita no se ha calmado aún. El fascismo húngaro lanza
periódicamente sus legiones contra los judíos. Sus desmanes —come-
tidos en nombre de un sedicente cristianismo— han provocado última-
mente una encendida protesta del Cardenal Csernoch, Príncipe Primado
353
BM_Laescenacontemporaneayotros escritos_TomoI.indd 353 08/10/10 17:48