Page 12 - Del Tradicionalismo a la Modernidad

préstamo ni se vende tampoco. Mi nombre es propiedad de mi
pueblo. Se lo he entregado pero con una condición: Que no me lo
maltraten. "Que busquen en ese nombre; no sombras para
cobijarse sino compañía para trabajar por Venezuela. Que no
pongan ese nombre al servicio de las malas causas, porque
entonces recuperaré el nombre y me quedaré solitario con él. Por
que no estaría dispuesto nunca a que mi nombre sirviera de
bandera para las malas causas. No lo pongan al servicio del odio
ni de los resentimientos. El resentimiento es pasión bastarda que
hace de los hombres, bestias; miserables. El odio los hace
ciegos y el resentido y el odiador no pueden estar cerca de un
hombre que siendo de ustedes han de usarlo para que el amor
sea dádiva permanente en la transformación de la vida de este
pueblo".

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