Page 65 - Carabobo Bajo Palabra
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lado «La tierra se llama Juan» . Para Rengifo, también Carabobo se llama
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Juan. O Pedro. Oigamos las voces de sus personajes:
Viejo I:
Pedro Juan se llamaba
Mujer II:
Él nada poseía… solo sus manos limpias…
Oficial I:
¡Y por su sueño supo morir cuando la muerte cruzó por el ca-
mino del sol que procuraba!
Ese sueño de Pedro Juan se llama Venezuela, se llama la patria. Un
coro de voces de soldados y campesinos nombra todas las batallas libra-
das para llegar y alcanzar ese sueño:
¡Horcones! ¡Niquitao! ¡Araure! ¡La Victoria! ¡El Juncal!
¡Vigirima! ¡San Félix! ¡San Mateo! ¡Urica! ¡Maturín!
¡Boyacá! ¡Las Queseras! 53
Carabobo es un camino que, para decirlo con el poeta Antonio Ma-
chado, solo «se hace al andar». Y ese andar obliga a superar sus estacio-
nes, ya citadas por Andrés Bello en su «Alocución a la poesía» y recorri-
das por Eduardo Blanco en su Venezuela heroica. He aquí algunas de las
batallas que allanan el camino a Carabobo en el poema de Bello:
Ni tú de Ribas callarás la fama
a quien vio victorioso Niquitao,
Horcones, Ocumare, Vigirima,
y, dejando otros nombres que no menos,
dignos de loa Venezuela estima,
[52]_ Pablo Neruda, Canto general, Biblioteca Ayacucho, Caracas, 1976, p. 221.
[53]_ César Rengifo, ob. cit., p. 16.