Page 739 - De Angostura a Colombia EL COMBATE POR LA LIBERTAD Y UNA MAGNA REPÚBLICA EN 1819
P. 739

De AngosturA A ColombiA 737



          Santander desarrolló una campaña mediática para banalizar la grandeza
          de este héroe venezolano. Explica José Sant Roz:
               Algunos pintan a Infante como hombre de color, valiente,
             pero que por su mala conducta se había hecho odioso entre sus
             compañeros de tropa. Decían de él, que no veían en la ciudad
             sus increíbles hazañas, sino sus desordenados apetitos. Burlaba
             a uno, ponía espanto al otro, reía de todos, codiciaba a casadas,
             pagaba a celestinas y vivía en poblado con aquel desembarazo
             primitivo, brusco donaire y altivez salvaje de llanero .
                                                             15
            El odio de Santander contra Infante provenía del conocimiento que

          este tenía de sus cobardías como militar durante la campaña que tuvo
          como fin la Batalla de Boyacá. En pleno ardor de la batalla, Santander
          bajó y se ocultó en un puente para evitar pelear. Todo el mundo sabía
          que era muy mal militar y, además, cobarde. Su propio coterráneo Ca-
          milo Torres lo calificó de tal cuando abandonó la Campaña Admirable,
          cerca de La Grita. Hasta allá fue Leonardo Infante y tomándole por la

          solapa le gritó: “¡Ven y gánate como nosotros las charreteras!”, un gesto
          que nunca se lo perdonaría el cobarde Hombre de las Leyes, y fue esta
          razón por la que luego fusiló a este prócer venezolano.

          Intento de magnicidio
          En 1829 ocurrió otra indignante intromisión diplomática estadouni-

          dense: el representante de los Estados Unidos en Bogotá, general Wi-
          lliam Henry Harrison, fue descubierto y expulsado por el Gobierno de
          Colombia, pero después de lograr su propósito.
            Actuaba como cerebro de un complot dirigido a derrocar a las auto-
          ridades bolivarianas de ese país. Para ello contaba con un traidor silen-
          cioso: Santander. Sin embargo, logró dos nefastos objetivos: el asesinato


          [15]_ José Sant Roz. (2013). “Hoy se cumplen 194 años de la gran chorreada de
          Santander”. En Aporrea.org publicado el 7 de agosto.
   734   735   736   737   738   739   740   741   742   743   744