Page 84 - Vida ejemplar de Simón Bolívar
P. 84

Vida ejemplar de Simón Bolívar

               precisado todo el valor concreto del hombre para salvar al héroe
               de sucumbir a la inepcia de vocingleros papagayos.
                  Gentes alarmadas han pedido que se entierre a Bolívar tal como
               un grande español pidió se enterrase al Cid. Pero el muerto sería
               demasiado grande. Para enterrarlo, faltaría la inmensa urna que
               pedía para enterrar sus sueños y su dolor el poeta del intermezzo
               y para llevarla en hombros, los doce gigantes. No abundan los
               gigantes en estos tiempos y no se encontrarían para cargar la urna
               simbólica de Bolívar. Y pues no es posible enterrarlo, hagamos algo
               mejor y más justo. Sigamos su alto ejemplo. Exploremos su alma
               con honradez. Llevemos a la cuenta del hombre los errores, cuando
               los haya. Llevemos a la cuenta del héroe, del padre, el caudal de
               enseñanza, de grandeza, de buena fe, que en él hay. Libertemos al
               Libertador, que se consagró a libertarnos, de las patrañas y de las
               inepcias que la inconsciencia y el oportunismo quisieren amontonar
               sobre su nombre. Acallemos el culto palabrero. Reemplacémoslo con
               el culto fervoroso y silente de los devotos primitivos. Empresa para
               los jóvenes más jóvenes de mi país. Aquí ha de cerrarse por fuerza
               lógica este pequeño libro. Es un intento de aislar para enseñanza
               la vida ejemplar de Simón Bolívar. Sírvanos de estímulo, no de
               reproche y confusión.





























                                         83
   79   80   81   82   83   84   85   86   87   88   89