Page 13 - Viaje a Sandino
P. 13
Abreu, un hombre que no ha muerto, porque la vida
se enamora tanto de él.
Es mi primer día y aquí estoy esperando un avión
que me llevará a Nicaragua en esta misma tarde. Viajé
y voy solo, tan acompañado de mismito yo.
Comienzo a escribir frente a una mujer que mira
a un ser extraño, pero que sin reservas le dice cómo
llegó a querer a Omar Torrijos.
***
Jamás he soportado a la gente que habla sin vehe-
mencia, tienen el corazón monótono.
Este gringo a mi lado no cesa de hablar, es toda
una paranoia verbal, un moscardón que gira y gira
sin llegar a Shakespeare, ni a Byron, ni a Whitman y
habla de todos ellos y de Conrad, y no se calla, ni aun
cuando bebe la cerveza y paga la fácil vecindad del
tedio. Es como si rezara, es el murmullo de una vida
aniquilada, prendida de la única cuerda que le queda,
una voz y una tos y el desmayo de sus largos y cansa-
dos pelos que habitan fieles un cráneo de melcocha.
***
12 ‹‹ viaje a sandino (san sebastián de yalí, nicaragua, 1985) Orlando Araujo