Page 69 - Sencillamente Aquiles
P. 69
aquiles nazoa
Sí, la que le compramos de contado;
pues le metimos un jamón planchado
y al ir hoy a cortar un pedacito,
la sirvienta de adentro pegó un grito
porque el jamón estaba conectado.
—Además, casi todas las mañanas,
al meterle la torta de manzanas
el motor hace un ruido
que despierta al chofer de mi marido…
—Bueno, pues, yo confío
en que hoy mismo vendrán a repararla.
Mire que vamos a necesitarla
para la graduación de un primo mío.
Usted sabe: mi primo Pantaleón
que llegó de Chicago por avión.
Cuelga el auricular, y la mirada
le tuerce a alguna pobre cocinera,
como diciéndole: —¡Desventurada,
qué le vas a tirar a mi nevera!
Y es lo peor que si usted, que no es discreto
le suelta un «bollo» que la larga fría,
todo el mundo lo acusa de irrespeto
y le acuñan un mes de policía.
¡Lo que le prueba una vez más al mundo
que no hay justicia en este mundo inmundo!
69