Page 489 - Escritos de ayer y hoy

territorio que hoy llamamos Venezuela, en un amplio territorio
nacional con presencia aborigen en montañas, llanuras, ríos y,
por supuesto, la costa oriental del lago de Maracaibo, Cabimas,
etc., y vivíamos sin dominación, opresión y explotación, en una
sociedad cacical de pueblos aborígenes en una relación armó-
nica con la naturaleza.
Con la llegada de españoles y otros europeos, en un proceso
de invasión, conquista y colonización desde agosto de 1498
por las costas de Macuro, en el oriente del país, nuestro des-
tino cambió a lo largo de todo el territorio en los siglos xvi,
xvii, xviii, y con los yanquis desde los siglos xix, xx y xxi,
imponiéndonos la odiosa división de clases y de colores, como
diría Bolívar; y además, toda la dominación de las oligarquías
criollas asociadas con el complejo industrial militar del impe-
rialismo mundial desde la IV República.
No ha sido fácil retomar nuestro rumbo histórico natural,
pese a la resistencia heroica de siglos como pueblo libre y so-
berano frente a una cultura autoritaria y mercantil de domina-
ción. Todo un procerato civil y militar ha ofrendado sus vidas
en búsqueda de los caminos de libertad, que siempre van en
nuestro andar. En esa lucha no hemos arado en el mar.
Hoy pudiéramos decir que tenemos historias, experiencias,
doctrinas, teorías para la liberación definitiva de toda domi-
nación, opresión y explotación extranjera. Tenemos un idea-
rio bolivariano y un pueblo virtuoso, solidario, digno y rebelde,
con niveles de organización respetables a pesar de las limita-
ciones y carencias, que se expresan a partir de los antivalores
de la sociedad de clases y del capitalismo que hemos heredado
de los invasores: eurocentrismo, pitiyanquismo, egocentrismo,
burocratismo, corrupción, drogas, la cultura del narcotráfico,
bachaqueo; en síntesis, individualismo pequeño burgués.

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