Page 40 - Escritos de ayer y hoy
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asesinaron en su apartamento: un cohete tele-dirigido, dispa-
            rado en la distancia, llegó y explotó, matándolo. Esas acciones
            pueden llegar aquí, lo he dicho a los compañeros con respon-
            sabilidades importantes: debemos cuidarnos, no podemos andar en
            cambote e improvisar sin contar con planes de movilización.
               En una oportunidad, dos soldados del ejército donde estaba,
            aunque no en la misma unidad, desertaron y se fueron para
            el ejército de la organización Al Fatah; eso fue en el oeste de
            Beirut. De inmediato se mandó una unidad a rescatar el ar-
            mamento que se habían llevado; cuando la patrulla de nuestro
            ejército llegó a reclamar las armas, no se las quisieron entregar
            y se formó una plomazón entre el Frente Democrático para la
            Liberación de Palestina y Al Fatah. Para resolver el impasse,
            tuvieron que intervenir Yasser Arafat y Nayef Hawatmeh, líder
            ideológico y político del FDLP. La anécdota ilustra que había
            pugnas internas dentro de la OLP. Esta instancia de organi-
            zación se fue agotando, aislando por esas luchas internas. Las
            direcciones de las siete organizaciones agrupadas en torno a la
            OLP no analizaron bien la coyuntura que les tocó vivir y diri-
            gir, unida al desplome de la Unión Soviética. También sucedió
            que, a pesar del apoyo de países como Libia y Siria, fue apa-
            reciendo otro movimiento de carácter religioso en los levan-
            tamientos de masas que se daban en los territorios ocupados.
               Volviendo al objetivo del viaje, una vez ubicado en las activi-
            dades planificadas durante los meses de enero y febrero de 1979,
            la pasamos entre las ciudades de Damasco –capital de Siria– y
            Beirut –capital del Líbano–, conociendo a los compañeros y com-
            pañeras árabes de la resistencia, sus locales públicos y algunos
            clandestinos. Era un ambiente complejo y exigente, que viví in-
            tensamente durante estos provechosos y ardientes días y meses.
            Debatimos mucho sobre la situación venezolana y, de mi parte,
            trataba de comprender la compleja situación política del Medio
            Oriente, las contradicciones entre los Estados árabes, los partidos

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