Page 51 - Caracas: 20 Historias 20
P. 51

Como era de esperarse esa noticia causó algara-  FUENTES
                bía en la sociedad de aquel tiempo, debido a la
                primicia y novedad. Es así que el señor Álvarez,    Catálogo del Patrimonio Cultural Venezolano (2007) Munici-
                en honor al logro de Susana, vistió a una niña   pio Libertador, Caracas: Instituto del Patrimonio Cultural
                                                         Rosenblat, A. (1984) Estudios sobre el habla de Venezuela.
                de reina. Esto atrajo la atención del padre de
                                                            Buenas y malas palabras. Tomo II. Caracas: Monte Ávila
                Susana Dujim que por casualidad pasaba fren-  Editores.
                te al negocio y curioso preguntó qué hacia la
                niña ahí. Al enterarse, dijo que él era el padre
                de Susana y que llevaría a su hija a comer en el
                negocio de los Álvarez. Al presentarle la arepa
                tostada con el relleno de pollo y aguacate en
                su honor la llamaron la reina pero era tan bella
                que requería un adjetivo que le diera distinción,
                entonces le añadió pepiada.
                Según nos refiere Ángel Rosenblat, esa palabra,
                propia del calé de los jóvenes, equivale a chéve-
                re, es decir, algo o alguien que está bueno, bo-
                nito. “Eso está pepeado” o “Está pepiá”. También
                se desambigua a pepiado/pepiada o pepito para
                género neutro. (De ahí el nombre de una cono-
                cida marca de pasapalos, bocadillos o snacks de
                palitos de maíz horneados con sabor a queso).
                Curiosamente para la época estaba en boga los
                vestidos de faldas plisadas con lunares, llenos de
                pepas generalmente negras sobre fondo blanco,
                aunque también las había de colores, por tanto
                las damas andaban todas pepiá, a la moda.
                La Reina Pepiada es un Bien de Interés Cultural
                reconocido por el Instituto del Patrimonio Cultu-
                ral desde 2005.




                                 Una arepa de certamen  ¦  49
   46   47   48   49   50   51   52   53   54   55   56