Page 493 - Sencillamente Aquiles
P. 493

CONVERSACIÓN CON UN COCHINO








                     Cochino, buenos días.
                     Cochino, ¿cómo estás?
                     ¿Qué me cuentas, cochino?
                     ¿Qué novedades hay?
                     ¡Espera! No te asustes:
                     no te vengo a matar.
                     Acércate, cochino:
                     cochino, ven acá.
                     Quédate aquí echadito
                     sin gruñir ni roncar,
                     y como dos amigos
                     vamos a conversar.


                     Tú no sabes, cochino,
                      qué lástima me da
                     saber que a ti la gente
                     no te suele nombrar
                     sino para hacer chistes
                     por lo hediondo que estás,
                     y que nadie en el mundo
                     se te puede acercar
                     sin decir: ¡fo, carrizo!,
                     sin decir: ¡fo, cará!
                     Yo, cochino, te admiro,
                     yo te admiro a pesar

                                        493
   488   489   490   491   492   493   494   495   496   497   498