Page 127 - De mi propia mano
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3  los señores oficiales conservarán sus espadas, caballos y equi-
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                 pajes.

                    contestación:
                    3  concedido.
                     o
                    4  en consideración a la bizarra conducta que han observado ayer las
                     o
                 tropas españolas, y a comprometimientos particulares que pueda haber
                 en algunos individuos, así europeos como americanos, se permitirá que
                 los oficiales y tropa que quieran pasar a españa, lo hagan por los puntos
                 que estime a bien el gobierno de colombia, pudiendo quedarse aquellos
                 que gusten hacerlo, bien en la clase de ciudadanos, bien al servicio si son
                 admitidos.


                    contestación:
                    4  Se permitirá el pase a españa de los oficiales y tropa que gusten
                     o
                 hacerlo, pero considerados como prisioneros de guerra, prestarán el jura-
                 mento de no tomar las armas contra los estados independientes del Perú
                 y colombia en tanto no sean canjeados. Su viaje lo harán por Guayaquil
                 y Panamá.
                    5  De cuenta del gobierno de colombia correrán los gastos para con-
                     o
                 ducir a la habana, o al primer puerto español, los oficiales y tropa que por
                 el artículo anterior sigan a europa, siendo obligación del gobierno español
                 pagar estos gastos en el primer punto de su dominación al comisionado.


                    contestación:
                    5  concedido.
                     o
                    6  como las tropas españolas que cubren a Pasto y se hallan en todo el
                     o
                 territorio desde esta ciudad a aquella están comprendidas en esta capitu-
                 lación y son prisioneros de guerra, se nombrarán dos comisionados por el
                 excmo. señor general aymerich, y dos por el señor general Sucre para que
                 vayan a entregarse de las armas, municiones y almacenes de los prisioneros,
                 y de todo cuanto allí exista, pero con atención a las circunstancias de aquel
                 país, el gobierno español no puede garantizar la obediencia de este artículo;




                                          biblioteca ayacucho
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