Page 433 - De Angostura a Colombia EL COMBATE POR LA LIBERTAD Y UNA MAGNA REPÚBLICA EN 1819
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               ... un largo proceso de depuración de todas estas realidades es-
             paciales [fragmentadas] afrontando las presiones surgidas de to-
             das las fuerzas sociales expectantes de un cambio entre el mundo
             colonial y la modernidad. Vencer la diversidad regional, crear
             sistemas centralizados de gobierno, liquidar las castas y, con ello,
             liquidar las mentalidades racistas y sentimientos de dependencia
             entre los sectores oprimidos no podía hacerse una legislación rá-
             pida sino a lo largo de un proceso de reordenamiento [político],
             social y económico (Tovar, H., 1986: 373).

            El análisis que hace Tovar es pertinente, puesto que los desafíos que
          tendrán las élites criollas en todo el siglo XIX son precisamente los que
          menciona el autor, obviamente, estos problemas van cambiando o se
          van trasformando dentro del proceso histórico.

            Uno de los problemas centrales, en el primer momento, es sobre quién
          recaería la soberanía, que antes estaba depositada en la monarquía. Por
          un lado, esta podía recaer en el nuevo gobernante, José Bonaparte, pero
          este fue visto como un intruso, por una parte; y por otra, en la misma
          Península se hablaba de que tal soberanía residía en el pueblo. Según
          Martínez, el movimiento de reasunción de la soberanía por los pueblos
          fue general, y su forma organizativa fueron las juntas supremas de las

          provincias y de los reinos. Cabe aclarar aquí, que estos movimientos
          empezaron a ser liderados por juristas y clérigos (estos últimos de la
          jerarquía media y baja), quienes en el nombre del rey preso y temero-
          sos de la invasión francesa, “se comprometieron con tres propósitos:
          la fidelidad al rey Fernando VII, la defensa de la religión católica, y la
          búsqueda de la felicidad de la patria” (Martínez, A., 2005: 52).

            Sin embargo, cabe señalar que, al momento de la reasunción de la
          soberanía por parte de los pueblos, las diferentes juntas provinciales y
          cabildos entraron en conflictos. Parte de estos conflictos no eran nue-
          vos, algunos de ellos ya eran de vieja data, pero que con tal situación los
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