Page 36 - Mr Boland
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...se podía entrar en aquellas casas como si se pasara por una
rendija bajo la gran costa del mundo.
... en esa penumbra cargada de olores carrompidos, era posible encontrar
una calma benigna, pues la vida carecía allí de más de la mitad de su
fuerza y no era posible tropezarse con gritos y miradas de furia.