Page 488 - De Angostura a Colombia EL COMBATE POR LA LIBERTAD Y UNA MAGNA REPÚBLICA EN 1819
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486   Hildelisa Cabello Requena



             pueblos de las misiones capuchinas catalanas giraba la vida económi-
             ca, política, social y religiosa de la apartada provincia orinoquense. El
             comercio de exportación-importación por el puerto de Angostura con-
             servó su tradicional dinamismo intrarregional con las provincias de los
             llanos venezolanos, Barinas y Apure, cuyos productos eran enviados al
             exterior a través de los vínculos comerciales tradicionales que mantenía

             esta provincia con las Antillas, EE. UU. y Europa. De Barinas se trans-
             portaban a Angostura mulas, cacao, añil, algodón, a cambio de mercan-
             cías europeas. De Angostura salían lanchas mercantes hacia Cabruta,
             desde donde se desplazaban por el río Apure a San Vicente, vía río San-

             to Domingo, hasta Totumos, embarcadero de Barinas. Por su parte, San
             Fernando de Apure fungía como almacén de este dinámico comercio
             fluvial. Para entonces, la actividad comercial por Angostura era atendi-
             da por comerciantes particulares locales, que incluía a los capuchinos
             catalanes; y eran utilizados 34 barcos pequeños para el transporte del
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             comercio de cabotaje y el tráfico con las colonias extranjeras . Para este
             periodo la población de Angostura era de 6.565 habitantes de un total

             estimado, entre 34.000 y 40.000 habitantes para toda la provincia, in-
             cluidos 19.425 indígenas .
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               Las dificultades acumuladas por el sector productivo regional origi-
             naron una severa crisis fiscal en 1810 que afectó los fondos públicos.
             Los ingresos anuales ascendían a 1.131.896 reales y los egresos eran de
             2.660.423 reales, lo que resultaba un saldo negativo de 1.528.896, a lo
             que debía agregarse una deuda contraída con la Intendencia de Caracas
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             de 4.686.462 reales . El estado de las finanzas y la evidente paraliza-
             ción de la administración pública generaron un clima de inestabilidad


             [7]_ Francisco Depons. Op. cit. p. 356. Manuel Alfredo Rodríguez. Op. cit. p. 142.
             [8]_ Ibidem, pp. 348-349. Pablo Vila. Geografía de Venezuela. Tomo II, p. 431.
             [9]_ Bartolomé Tavera Acosta. Anales de Guayana, p. 187.
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